Para convertir a Tula en una Ciudad turística, de oportunidad y generación de empleo se deben aprovechar las características para el desarrollo con las que cuenta el municipio, indicó el alcalde electo Antonio Leija Villarreal.
Leija Villarreal destacó que Tula tiene todas las bondades para ser una ciudad de primer nivel, ya que posee una ubicación ideal, potencial demográfico y económico, turismo, agricultura, gastronomía, y actividades artísticas y culturales.
“Es tiempo de actuar, no hay tiempo para improvisación. No esperaremos a enero para hacer planes, estamos trabajando para dar resultados desde el día uno”.
“Esta ciudad necesita respuestas viables y sostenibles, un gobierno municipal orgulloso de su tradición, pero con visión de futuro y compromiso con el presente”.
Tenemos ya un enfoque muy claro de cómo vamos a trabajar, primeramente tenemos que fortalecer y empoderar a las comunidades, segundo, mejorar las condiciones de vida de la gente al dar respuesta a sus necesidades y por ultimo reconstruir el tejido social. “El objetivo es reconstruir la relación entre el ayuntamiento y la sociedad para enfrentar los grandes retos de la ciudad.”
En sus recorridos por las comunidades aseguró que la gente pide que se hagan cosas sencillas “y esas son las que podemos ayudar inmediatamente, sin tanto protocolo, esas peticiones generan solidaridad y si les apoyamos cambian la perspectiva de la población hacia nosotros.”
“Los comisariados y delegados ejidales serán parte del equipo, junto al ayuntamiento supervisaran y nosotros atenderemos las problemáticas actuales y las que surjan en el futuro”, pues consideró que los temas sociales son complejos y la única manera de resolverlos es trabajar para la gente de manera directa.